jueves, 17 de enero de 2013

Llegué y le conté por lo que estaba pasando;
me dijo que no le sorprendía, es más, lo estaba esperando.
Ya lo decía Bob: ''Behind every beautiful thing there’s been some kind of pain''


Quizá fui yo la que se quedó atónita, 
¿Cómo lo iba a saber? ¡Si yo disimulo muy bien! 

Pájaros que vuelan al mismo nido.
Nosotros, sin embargo, huimos.
Creo que esa es la razón.

Todo tiene un límite, no podemos con todo.
Pero bueno, terminamos por encajarlo bastante bien.

Por eso siempre volvemos a las andadas.
Él es el quinto macho y yo lloré en el vientre de mi madre.


3 comentarios:

  1. a veces son necesarios nuevos nidos, para tanto pájaro en la cabeza. Una madre, siempre es un buen sitio para llorar

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  2. Creo que aunque digamos que no volveremos a tropezar con la misma piedra, hay un imán irresistible que nos empuja a ella o a otras parecidas una y otra vez...

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  3. Creemos que nos escondemos bien, pero no es así. Que no te sorprendan éstas pequeñas cosas, porque quien bien te conoce (como son las madres), saben lo que escondes. Y son muy listos ¿sabes? no dicen nada. Se hacen los locos. Esos son los que más loca me vuelven. Ay. Que no pille por sorpresa, ni te sorprendan (en el mal sentido de la palabra, en el bueno, siempre).


    P.D. Aquella entrada fue borrada. Me alegro que te pareciese ingenioso. :) Gracias por el piropo.

    Un beso.

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